martes, 23 de diciembre de 2008

Caliope pa todo el mundo

http://www.youtube.com/watch?v=j5p4lX3MtOw

Realmente nunca voy a encontar algo que se le parezca a este coro sobrenatural.
Me enorgullece haber sido parte de este grupo de locos mansos durante 2 años.
Los amo.
Recomiendo ver todos los demás videos de Caliope 2008. No tienen desperdicio.
Sincerily yours,
Mak :)

Esto es procastination

http://www.youtube.com/watch?v=ojcEQO74taQ

Carta a Papa Noel


Querido papa Noel
Mi lista de regalos para esta Navidad es la siguiente:
. Serenidad ante todo. Quiero podes hacer caso omiso de aquellas cosas que me sacan y me desequilibran, como ser: la gente que habla más de la cuenta, la gente que se victimiza, los engreídos, los ventajeros, los avaros, los malhumorados, los desagradecidos, los holgazanes, los pesados, los cagones, los egocéntricos, los poco comprometidos, los antipáticos, los hipócritas, los desubicados, los chatos, los insensibles, etc.
. Mejor, que esos defectos desaparezcan.
. Estímulos para poder concretar todas las cosas que tengo en mente para el año que comienza. Prometo poner voluntad, pero también necesitaría que me dieras una mano con factores externos que me comprometan mas con mis actividades. Que se yo: que me ponderen un cuento, que me enseñen cosas, que me sorprendan con una linda canción, que me presenten gente, que me pidan ayuda, lo que sea, pero que me estimule para seguir creciendo. Quiero CRECER, no te pido mas centímetros que mal no me vendrían, te pido grandeza de espíritu y enriquecimiento intelectual, porfis.
. Salud mundial. No hablo solo del calentamiento global, de esta verdad incomoda que a todos nos preocupa, sino de remedios para las enfermedades. Que haya avances medicinales, que se encuentre la cura del sida, del cáncer, del cólera, de la malaria, del mal de chagas, o al menos que no se muera tanta gente a causa de ellas. Por lo menos que haya una política de PREVENCION que salve vidas en todos los continentes. Es mucho pedir?
. Que se reduzca mi mundo de fiaca, mi “procastination lifestyle” y me incentive para HACER COSAS DE MI INTERES, como cuentos, dibujos, reflexiones por escrito, ejercicio, viajes, solidaridad. Y que lo que haga SIRVA, con llegar a un solo corazón me conformo porque para mi eso es una mini manera de servir. Pasa que yo soy muy inquieta y a veces me entretengo demasiado en cosas que no debo, asique lo que te pido es eso, que me mantengas en el camino, que no me dejes andar por el borde o subirme al cordón porque me descarrilo. Ya sabes, la distracción es la obstrucción a la construcción. Y no quiero destruirme, para nada.
. que la gente tenga que comer y donde vivir. No más indigencia ni supervivencia diaria. Alimentación, sanidad, higiene, educacion y vivienda gratis para todo el mundo. No seas guacho!
. cantar rico y cocinar lindo.
. saber negociar.
. no hacerme mala sangre por nimiedades.
. Reirme de mi misma
. Alfabetizacion mundial.
. ehhhh…tambien te pido CONCORDANCIA. Quiero equilibrar mis objetivos y mi capacidad para conseguirlos, que sean como una linda voz y un instrumento musical, que concuerden y que fluyan en la misma sintonía, no lentos ni acelerados, pero que fluyan hasta conjugar y concretarse. Entendiste algo? Poder llevar a cabo una idea que tengo en mente es mas criollo no? Y eso ya lo tomo como un triunfo personal, te lo juro.
. que vengan a visitarme a Madrid algunas de las personas que quiero. No te pido todas, pero algunas si, con una visita al mes me conformo!
. Bueno, no quiero que te vuelvas loco con mis pedidos pero si podes darme una cuota de conexión conmigo misma, aunque sea una vez al mes, te lo agradecería. Hablo de autoconocimiento, sensibilidad y armonía en mi interior. Eso me viene muy bien para tomar decisiones. A lo mejor si empiezo yoga…
. Que mi familia este bien, unida y llena de amor. Siempre.
Say no more santa! (y yo que odio a los egocentricos....)
Te espero hoy a la noche, no me falles!!!
Maki

domingo, 7 de diciembre de 2008

I´m Back

Luego de casi dos meses de abandono del blog. y de vuelta en Madrid despues de un mes en mi Buenos Aires natal, escribo en mi blogsito que nadie lee.

Igualmente, mi post de hoy no tendrá mucha letra, ya que quiero mostrar un dibujo.

Resulta que en la ciudad porteña se me dio por hacer un taller de dibujo (al cual asistí cuatro clases) y no hice mas que dibujar princesas respondiendo a la consigna de la profe que nos dio cuentos de princesas olvidadas que teniamos que representar con ilustraciones totalmente personales.

Y bueno, aqui está el cuento y mi dibujín de la princesa Pitonisa. Disfrutad del texto y de mi adaptación visual.

"La Princesa Pepita de Pitonisa es muy pequeña, mucho más que la mayoría de sus amigas. Sin embargo, ve hasta muy lejos, a veces incluso hasta el día siguiente.
Sabe el lunes lo que pasara el martes, el miércoles lo que ocurrirá el jueves, y axial hasta el domingo.
El domingo, descansa.
Echa las cartas, lee los posos del café y las líneas de la mano.
Su único problema es que es un poco caótica, se lía y se enreda ella sola, se confunde y se embrolla.
Se equivoca de día al hacer los pronósticos, mezcla nombres y apellidos.
Confunde bastos con espadas, oros con copas. Todo se le enmaraña y ella sola se engaña. "


Frase del mes


martes, 14 de octubre de 2008

Verte sin mirarte

Enterró su sueño de princesa el día que su padre se escondió bajo la falda de su amante para nunca más volver.
Tenía 11 años y toda la responsabilidad encima. Su madre trabajaba full time como cocinera en un restaurante lejos de casa y fue ella, tan niña, la que se ocupó del hogar y de sus dos hermanitos. Creció limpiando, ordenando, cocinando y cuidando de los demás. Su vida se transformó en una rutina que la encarceló y no tuvo más remedio que aceptarlo. Pasaron los años y Emilia se acostumbró a ver la realidad desde su ventana, se aisló y se quedó con pocas amigas a quienes casi ni veía. Se fue marchitando su pubertad en ese encierro que le arrebató su infancia y le agrietó el corazón.
Pero un día la niña cumplió 18 años y terminó el secundario. Estaba en condiciones de trabajar y su madre le consiguió un puesto como camarera en el mismo restaurante donde ella preparaba la comida. Los niños estaban más grandes y aptos para el desapego de su hermanamadre mayor. Emilia se vistió de negro y salió a la calle, animosa.
En el colectivo pensaba que su nuevo empleo le iba a abrir otro mundo, que aquí nadie la conocía, que era la hija de Ramona pero no la chica hermética, la tímida del barrio, la inadaptada social. Aquí podría hacer amistades, sentirse útil, participar de la vida. Tenía mucha ilusión.
Al año, Emilia estaba encargada de la terraza y muy afianzada en el oficio de la bandeja. Un día, mientras tomaba el pedido de una pareja, levantó la vista y vio a su padre en la vereda de enfrente. Sentadito y tieso, al pie de un portal, mirándola.
La escena se repitió todos los miércoles y Emilia no dijo nada. Lo veía ahí sentado y lo odiaba. No quiso ni acercarse al tipo que le arruinó su vida, prefirió serle indiferente y ocultárselo a todo el mundo, incluida su madre. Prefirió no asumirlo. Cuando terminaba su turno, Emilia doblaba a la izquierda y se iba sin mirar. Su padre nunca la siguió.
El día que Emilia cumplió 21 años cayó miércoles. Estaba limpiando una mesita de la calle cuando sintió que la penetraban con los ojos y se volteó. Estaba su padre sentado en la mesa de al lado y le pidió un café. Emilia se lo llevó y le cobró al instante. Su padre la miró fijamente y le depositó un billete de dos pesos arrugado. Emilia sintió sus ojos llenos de lágrimas y entró al restaurante sin mirar hacia atrás. Abrió el billete y leyó:. No te molesto más. Feliz cumple hija.
Emilia tampoco abrió la boca esta vez. Su padre ya no estaba en la mesa y nunca mas estuvo un miércoles en el portal de enfrente. Emilia no pudo ablandarse, se aferró al daño causado y prefirió olvidarse de ese padre que alguna vez la había vestido de princesa.

lunes, 13 de octubre de 2008

Complicadas tratativas

Yo sabía que no podía faltar, por más reacio que fuera a ese tipo de reuniones. Me quedé haciendo tiempo en el bar de en frente hasta que se hizo la hora. Cuando entré, ya estaban todos mis hermanos ocupando la casa de mi padre, un mes después de su fallecimiento. Había que hablar en serio y tratar de ponerse de acuerdo, y eso era un reto para los hermanos Galindez. Por suerte el tema números estaba cerrado, pero ahora había que hacer la repartija. Hubiera sido mucho mas fácil que el viejo dejara un testamento detallado pero no, se opuso a enfrentarse a todo lo que le recordara a la muerte y prefirió dejar su legado a la buena de Dios. Total voy a estar muerto, me da igual lo que pase después con mi herencia. Eso decía y la palabra herencia sonaba a fortuna pero nada que ver. Tanto quilombo por una herencia de mierda.
Después de que cada uno se pusiera al tanto de la vida de los otros, yo, como hermano mayor que soy, solté un discurso pacifista un tanto solemne para abordar la reunión sin discusiones. Además quería terminar rápido con toda la pavada porque tenía bastante con ver a mis hermanitos tan seguido, yo que soy el más cortado de la familia.
“¡Ay Antonio pero qué teatrero! ¡Ahora te venís a hacer el hermano correcto! “. Esa fue Julia.
Empezamos como el orto.
Mi hermana es un año menor que yo y me parece que me detesta. Cómo si yo tuviera la culpa de su fracaso profesional como abogada penalista. Está resentida porque yo en mi puta vida agarré un libro y me va bárbaro en la agencia, y ella hizo un carrerón y se caga de hambre, pero bueno. No era momento para escándalos asique preferí aguantármela.
Por suerte Martín la paró y optó por agilizar el trámite. Había llevado una lista del inventario de papá y al lado de cada pertenencia puso con lápiz la inicial de cada uno de nosotros. Medio audaz el tipo pero lo banqué.
Javier no lo podía creer. "¿Asique vos sos el que adjudicas los bienes? Andá a cagar Martín."
Yo intervine y propuse que lo leyéramos tranquilos pero Julia vio enseguida algo tremendamente injusto. “Cómo que el sillón es para Javier? Pero acaso no saben que tengo un marido lisiado?” Me revienta lo exagerada que es mi hermana, lo que tiene Jorge es la columna delicada, pero le di la razón para evitar otro escándalo y ella me espetó: "No te me hagas el conciliador que no te pega ¿eh? "
No había caso.
Estuvimos más de 3 horas dándole vueltas al asunto hasta que decidimos la repartija de muebles, decorados y vajilla, el alquiler del piso en el que estábamos, la venta del departamento de Belgrano y la división de las cocheras. Como eran 3, yo fui el primero en rechazarla para que no se armara un sorteo que siempre se torna polémico y se extiende más de la cuenta, pero fue peor porque Julia dictaminó: "¡Cómo sos Antonio, mirá que desmerecer la herencia de tu padre! "
Suspiré y mentí. Dije que tenía que irme volando a encontrarme con un cliente.
-Me llaman cualquier cosa.
-A dónde? A tu casa de Pilar, a tu departamento de Recoleta o a tu finca en Punta del Este?
- Donde quieras Julia. Si llamás al celular va a ser más fácil que me encuentres.
Y se fue Antonio, dejando ese aroma tan personal, esa fragancia de último perfume de Armani que invadió el ambiente y que hizo que todos lo envidien en silencio.

jueves, 9 de octubre de 2008

3 latinotalentos

No me alcanzaron los aplausos. Desde mi humilde blogsito quería agradecer a estos tres tipos por ser músicos que llegan al corazón. Tuve el lujo de verlos a los 3 sobre el escenario, recién, en la sala Galileo Galilei, Madrid. Primero Lisandro, luego Kevin (and The Nada), por último Jorge. ¡Y que bien, que contenta me fui de esa sala!
Poesía hecha canción, buena onda y sonrisas por doquier. Ojala algún día yo pueda transmitir lo que hoy me transmitieron estos chavalitos puro talento.
Pues nada, eso solo. Homenajarlos en esta noche otoñal. Hay que escucharlos porque hacen bien che, en serio.
¿Podré algún dia tomarme una caña con alguno de ellos?
Que lindo que es soñar, soñar no cuesta nada, soñar y nada más, con los ojos abiertos, que lindo que es soñar, y no te cuesta nada mas que tiempo.
Avoir :)

Ay Eugenia!

¡Qué feliz se puso Eugenia el día que Ignacio se recibió de abogado!
¡Y qué felicidad cuando Josefina se casó de blanco!
Lo que no sabía Eugenia es que sus dos hijos la dejarían sola en su casita de Temperley. Que se irían los dos a vivir al extranjero y que su viudez le pesaría hasta el resto de sus días, envuelta en una soledad absoluta, aburrida y gastada por los años.
Y así morirá Eugenia, solitaria y encerrada. Ni sus nietos se enterarán. La loca de Eugenia, dirán los vecinos, la que se dejó vencer y aceptó su condición de viuda eterna y madre abandonada.
¡Qué triste se puso Eugenia la víspera de su muerte cuando la quietez de su hogar era su única acompañanate en la convalescencia!"

miércoles, 8 de octubre de 2008

Teléfono rosa

Dolores. Sí, la misma. Bueno, tampoco te asombres tanto, era cantado. Y viste que siempre es así. Cuánto mas puritana la familia más revelados los hijos. Sí, típico. Y ahora anda a saber. A mi se me hacía la canchera cuando me contó, pero se debe querer matar. Tal cual. No, del pibe ni idea. 6 meses como mucho. Espero que si, porque ellos están muy mal de guita. Sí, pésimo. No se, nunca entendí a que se dedicaba el viejo. ¡Pero totalmente! Mucho circo al principio y después se les cae la baba. ¿Qué? No, apenitas. Pero seguro que termina hecha un cerdo. Acordate en el colegio cómo lastraba.Tremendo. Bueno, igual seguro que te la encontrás. No, que va a estar laburando, no hace un carajo. Ok. Pero pará. Si te la cruzas hacete la boluda, ¿eh? por las dudas, que se yo. Listo. Besito.

Peculiaridades II

Hoy día, las siguientes peculiaridades:
  • Estornudé más de 8 veces en todo el día y obviamente, a la noche me resfrié.
  • Vi muchas hojas en las calles y reparé en el otoño anunciado, eran un montón
  • Vi la raya del culo de un obrero negro y peludo
  • Una vieja me hizo dos veces seguidas la misma pregunta en el metro. " Este va a Estrecho?" "Si señora, la próxima parada". Me senté en el banco del andén y se me sienta al lado a los 3 segundos. " Este va a Estrecho?"Alzehimer fulminante o vejez avanzada.
  • Lo único que vendí en la tienda en todo el día fueron unos aros y encima, a un señor.
  • Fui a la biblioteca y pedí un libro de Gelman. El bibliotecario me dijo: Gelman con "H" no? Pobre Juan, para qué ganaste el premio Cervantes en este país si te confunden con una mayonesa.
  • Me atacó un hambre voraz a las 7 de la tarde y me compré 100 gr de palmeritas en un almacén de la plaza de Tirso de Molina
  • Fui a un coloquio en donde Felipe Pigna, el historiador argentino que hizo "algo habran hecho" con pergolini, presentaba su libro "lo pasado pensado" y me interesé mucho. Qué documentado esta ese tipo che. Será el próximo Felix Luna, digo yo.
  • Me compré unos zapatos de fiesta a 12 euros
  • Cayó la bolsa de Japón un 10% (me explicaba un filósofo/economista que si cae la bolsa de Japon un 10% en un año es para asustarse, y en un día es para cortarse las venas!)
  • Retiré las entradas para ver a Lisandro Aristimuño y Kevin Johansen (bueno, eso fue ayer)
  • Comí tacos mexicanos con mi papá
  • Mi papá estuvo con los reyes
  • Estrené las pantuflas con cara de perro que me regaló mi hermanita :)

martes, 7 de octubre de 2008

Sos recuerdo

No te olvido
Ni hoy, ni mañana
Nunca te olvido
Se fue mi mundo contigo
Se fue mi vida
Te recuerdo, de miel,
en mi almohada,
en la alcoba dorada,
en el cielo estrellado
Te recuerdo, también,
en el sol que se pone
en los besos antiguos
en tu cara de niño.
Me fastidio, me enloquezco
cuando oigo tu voz
cuando te huelo
cuando en sueños te veo.
Porque tanto te amé, te recuerdo.
No te nubles, mi amor,
no te alejes.
Quedate en mi vida,
que yo no te olvido,
hasta que me muera.

Una noche como todas

Seca sus uñas.
Delinea sus ojos.
Calza sus tacos.
Rellena el corpiño.
Marca su escote.
Sube su falda.
Ajusta su top.
Pinta sus labios.
Suelta su pelo.
Perfuma su cuello.
Sonríe al espejo.
Abre la puerta.
Besa a su perro.
Sale a la calle.
Camina dos cuadras.
Mira la hora.
Espera.
Para un auto.
Sube la dama.
¿Pierde su tiempo?
No.
Sabe que paga.

domingo, 5 de octubre de 2008

jueves, 2 de octubre de 2008

Mujer presupuesto

Si estas esperando un bebé, tu futuro económico tendrá que tener cierta estabilidad que te asegure en alguna medida la manutención de la criatura, con todo lo que ello implica.

Hasta ahí todo muy evidente. Ahora, sugiero que empiecen a abultar sus billeteras aquellos padres que ya estén enterados que el bebé en camino es una mujercita. Y sugiero, también, que empiecen a considerar los siguientes gastos para los años venideros, porque las nenas crecen (y sus caprichos tambien).
Aquí los gastos.


  • papel higiénico en cantidad
  • diario intimos
  • biromes de colores
  • cartucheras gigantes
  • disfraces de princesa
  • pulseras
  • anillos
  • collares
  • cinturones
  • broches
  • aros
  • vinchas
  • gomitas para el pelo
  • horquillas
  • hebillas
  • peinetas
  • moños
  • esmalte de uñas
  • cutex
  • sombra
  • colorete
  • base
  • rouge
  • delineador
  • tapaojeras
  • rimmel
  • demaquillante
  • bolsos
  • carteras
  • secador
  • planchita
  • buclera
  • tintura
  • suavizante
  • crema de enjuague
  • cera
  • spray
  • perfume
  • colonia
  • vestidos (de fiesta, de día, de playa)
  • polleras
  • tacos
  • zapatos
  • deportivas
  • chatitas
  • botas
  • flores
  • apósitos
  • tampones
  • corpiños
  • lencería en general
  • peluquería
  • depilación
  • manicura
  • pedicura
  • joyas
  • cremas hidratantes
  • cremas antiarrugas
  • medias largas
  • pañuelos
  • chales
  • peines
  • cepillos
  • espejitos de bolsillo
  • pastillas anticonceptivas

En la lista hay cosas que nuestros padres no tienen porqué financiarnos. Pero a cierta edad nos independizamos y muchas de las cosas en la lista se nos presentan como indispensables. Cuando ya no está la billetera de papá es cuando nos damos cuenta de lo rápido que se desliza el dinero en nuestras cuentas bancarias. Y de lo tanto más fácil que es para los hombres mantener ahorros, porque hoy en día, en la era del individualismo, no tienen más gastos que corbatas, trajes, ropa en general, tabaco, espectaculos, restaurantes y preservativos. Por más coqueto que sea el muchacho, siempre gastará menos que la mujer. Y siempre tendrá mas tiempo. (ese es otro tema, ni que peinarse, ni que maquillarse, ni que combinar zapatos con cartera con vestido, nada)

Entonces me pregunto: ¿ No es hora de que aumenten el salario femenino habida cuenta de la obligtoria inversión de la mujer para cumplir con toda esa lista de parafernalias totalmente ciertas? Es decir, para cumplir con nuestra condición de MUJER.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Lágrima, llora

Lágrima que cae,
que duele,
que perturba.
Lágrima eterna
que yace dormida
en tu alma
y en tu piel.
Lágrima muda,
delicada,
peso piedra.
Florece en llanto,
pequeña lágrima,
brota y empapa
su cuerpo y su pena.
Lávala, lágrima.
Íntegramente, lávala.
Que si llora,
si llora mi amada,
se alivia su cara,
su cruz se aligera,
que si entera la lavas
le devuelves la vida.

lunes, 22 de septiembre de 2008

La teoría de Gulliver


Ayer fui a tomar unas cañas por La Latina y entre la gente que había estaba un catalán que expuso una enseñanza análoga que recibió de boca del padre de un amigo suyo.
Y decía algo así:
La vida es Gulliver durmiendo la siesta, Gulliver atado por cientos de soguitas que lo sujetan al suelo, Gulliver atrapado por los liliputienses. Cada soguita, por más mínima que sea, simboliza las ataduras de nuestras vidas. Y cada liliputiense es el título que queramos darle a la atadura que no nos deja escapar. Cada uno de nosotros, inconscientemente, nos vamos sujetando cada vez más hasta que nos damos cuenta de que estamos completamente atados y de que es casi imposible librarnos de las soguitas, por más gigantes que nos sintamos.
Soguitas que significan lugares, personas, estudios, profesiones, pongan el nombre que quieran. Y llegará el momento en que nos despertemos, como Gulliver en Lilliput, y veamos que estamos atados de pies a cabeza. Es entonces cuando pensaremos en el deseo de desatarnos, y será tarde.
Aunque haya quienes al verse amarrados por cientos de soguitas puedan resignarse y se queden allí, sujetados a la comodidad de las ataduras construidas a lo largo de la vida.
Pero también habrá gente fuerte de espíritu, y serán ellos quienes logren soltarse del todo. Pero no renegando de todo lo que se cosechó en la vida, si no aceptándolo. Aceptando cada motivo que silenciosa pero deliberadamente se fue clavando para convertirse en una soga dura de soltar.
Y seguramente dirá: ¡Pucha, no tendría que haberme dejado amarrar tan fuerte!

domingo, 21 de septiembre de 2008

Conversación con dibujitos


So surrealista!!!

La semana pasada no, la otra, estuvimos en la fiesta de un amigo de Gabi, mi novio. El anfitrión, Pablo, festejaba el aniversario numero 15 de la independencia de sus padres. Lo gracioso era que la fiesta se hizo en la casa de los padres que se la prestaron para la ocasión, porque como el acaba de tener un bebé no podía tirar su propia casa por la ventana con la criatura presente. Y bueno, llegamos y todo estaba estupendamente dispuesto. Antorchas en el jardín, mesita con pinchos de tortilla, platos distribuidos por toda la casa con patatas, doritos y mas porquerias. Bebidas de todo tipo y hasta una parrillita portatil donde Pablo improviso una barbacoa deliciosa. Pero ademas de la comida, me llamo la atencion el despliegue de juegos de entretenimiento. Habia un cuarto destinado a la wii, donde habia parejas jugando al bowling. Otro cuarto donde estaba la tele con la play y dos chabones jugando al win eleven. En ese mismo cuarto un juego en otra tele con 8 joysticks para participar en grupos y competir como si estuvieras en un programa de TV de preguntas y respuestas. Tambien habia otra pantalla plana con el karaoke mas pro que vi en mi vida y dos microfonos para hacer duetos. Y como si fuera poco, afuera habia una mesita redonda donde se podia jugar al poker!

Todo me pareci extrañamente divertido. Un festejo poco común y un motivo menos común todavía.

Pero lo que realmente rompió con la normalidad lograda en el ambiente festivo fue cuando entablé conversación con Pablo y un amigo:
Maki
Y a que se dedican ustedes?

Pablo
Hacemos doblajes.

Maki
Wow, no me digas. Y sos alguna voz conocida?

Pablo
Bueno, llevo muchos años en el oficio. Pero sí que hay una muy conocida.

Maki
A sí? Cual cual?

Pablo
Soy Piglet, el chanchito de Winnie Pooh, lo conoces?

Maki
Uy si! Lo re conozco, que gracioso!

Pablo
Bueno, y él es Bob Esponja.

(el amigo agacha la cabeza y sonríe)

Maki
Juaaaa. Buenisimo!!! Entonces puedo decir que estuve hablando con Piglet y Bob Esponja!

Pablo
Hombre, claro. Y muchos personajes más.


Y despues me contaron que hicieron de viejitas, de señores mafiosos, de niños y lo más exótico, de actores pornos. Joder macho, decían, ¡eso sí que es incómodo! ¡Tener a la tía ahi al lado y doblar esas escenas! Fuertísimo.

martes, 9 de septiembre de 2008

Y finalmente

Y así todo el domingo y así será toda la vida. Lo crucificamos al pobre. Pero lo más gracioso vino el lunes cuando volvíamos para Madrid en el auto.

- Ustedes se hacen los graciosos, todo muy lindo. Pero acá el señor no va a permitir que sigan gastándome toda la vida. Asique chicos propongo que hagamos un pacto de silencio.
- Si, claro. Un pacto de silencio.
- Por la integridad de mi persona. (Y puso su dedito índice en alto y tocó a cada uno de nosotros en la misma punta del dedito índice en señal de ¿compromiso?)
Y acá estamos, posteándolo. Ups!

Episodio2- En Francia como en Brasil.

Estábamos el domingo en el auto todos los personajes mencionados anteriormente. Y como estábamos a 20 minutos de Francia, nos mandamos con destino a Biarritz.
Pero cuando estábamos llegando a la frontera, mi tío dice:
- Che pará, acá habrá que cambiar plata no Manolo?
- Qué?
- Claro, tenemos que conseguir un lugar para cambiar plata.
- Me estas jodiendo
- No boludo
- No, para, no, no. (Amalia)
- Jijijijijijijijiji (Diego)
- Estas jodiendo no? (yo en el medio del asiento del conductor y el copiloto)
- No boludos, cómo voy a estar jodiendo. Cuando cruzás al Chuy para ir a Brasil tenes que cambiar a reales. Que me están diciendo?
- Pero si hace 8 años que existe el euro! (yo)
- Pero si hay una sola moneda para Europa Marcelo!!! (papá, a la misma vez que yo)
- Uy es verdad. Qué boludo.
- Esto queda para la historia (yo)
- Bueno ahijada, no me faltes el respeto. Me colgué, qué quieren.
- Jajajajaajajaja, muy bueno muy bueno (papa)
- Estoy viejo y hace como 30 años que no venía a Francia. Me distraje che.
- (siguieron las risas un buen rato)

Y luego vinieron las jodas, obvio. Y así lo gastábamos.
- Che, Marcelo. Por qué no vas a averiguar si venden rollo ahí? Pero llevate francos eh?
- No trajiste la máquina? Ah, claro, si no tenía rollo!
Marcelo ponderaba un hotelazo a orillas del mar.
- Sí, está lindo. Lástima que no tenés francos acá para pagarte un cuarto.

Episodio 1- La tierna ignorancia de mi tío

Este fin de semana tuve el agrado de pasarlo junto a mi papa, mi tío (que además es mi padrino) y un matrimonio amigo. Yo estaba medio colgada pero me perché de una ya que la propuesta era pasar dos días en San Sebastian, País Vasco, España. Imposible decir que no.
Cuestión que este matrimonio amigo le hizo entrega a mi tio Marcelo de una cámara de fotos digital que le mandaba la hija de estos desde USA cumpliendo con el encargo de mi tio. La cámara era de lo mas básica, pero bien bonita.

A la noche en el hotel mi tío me dice:
- A ver gorda, te muestro la máquina así me enseñás un poco como usarla.
- Claro padrino. Es muy fácil!
- Mira gorda que yo no entiendo nada.
- No, mirá. Vos aprendete que esta ruedita tiene que estar siempre en el dibujito verde, que este rayito es el flash, y que si le das al play podes acceder a las fotos que sacaste.
- Y si quiero borrar una foto?
- Apretas acá, donde esta el tachito de basura.
- Ah, buenísimo
- Y con la flecha de arriba le das a donde dice Delete.
- Bueno, después me tendría que hacer un machete porque no soy muy buen alumno.
- No, vas a ver que después no te cuesta nada.
- No se gorda, a mi la tecnología me supera.
- A ver, probemos ahora. Te saco una foto y ves como saca.
- No, pero como, si no tiene rollo.
- Ja
- Cómo???? (ese es mi papá)
- Que no tiene rollo, cómo va a sacar.
- Jjjjjjjjjaaaaaaaaajaaaaaaaaaaajaaaaa (papá y yo)
- Pense que me estabas jodiendo!
- Que? Ah…no, bueno gorda, ya sabes, tu padrino no entiende nada. No me gasten che!
- Es que es muy gracioso. Mirá, ves esto? Es la memoria (memory stick era too much) de la cámara y vendría a cumplir el rol del rollo, sólo que acá te entran cientos de fotos y encima una vez que las descargas en tu compu, le borras las fotos y la volves a poner en la cámara y sigue sacando.
- Ah pero yo que se gorda. Bueno, esta bien, esta bien.
- Mirá a la cámara. Click! Mirate.
- Ah bueno, que cara que tiene tu padrino.
- Jajaja
- Pero saca bien las fotos no?
- Si, saca bien saca bien.

viernes, 5 de septiembre de 2008

Zulma lengua larga

Zulma tenía años en el oficio. Zulma la tenía clara. Sabía manipular la cera y con delicadeza, ponértela y sacártela de cualquier parte del cuerpo. Se había iniciado a los 18 cuando su papá falleció dejando a ella y a su hermana huérfanas para toda la vida.
Así las cosas, tuvieron que ganarse la vida, entonces Zulma abandonó los estudios y comenzó a trabajar en la peluquería BEAUTY, en la esquina de su casa, en el barrio de Chacarita.
En la peluquería la adoraban. Zulma siempre sonriente, Zulma dulzura, Zulma la que te dejaba el pubis perfecto y el cuerpo lampiño. Las clientas siempre pedían turno con ella, porque además de atenderlas como si fueran una obrita de arte, ¡Zulma te hacía unos cuentos! Porque hay que decirlo, Zulma pertenecía a esa clase de personas que viven de lo ajeno y que disfrutan acumulando chismes a diario. Y esa clase de personas no tiene reparos en ventilarlos, más todavía cuando los implicados se conocen todos entre sí, con lo cual Zulma y su constante palabrerío se convirtieron en la excusa perfecta para convencer a la clientela de que había que ser depilada por ella. Y nadie se daba cuenta de que al caer en sus manos era inevitable no sólo criticar a toda la vecindad si no contar a pata suelta todos sus vaivenes emocionales involucrándose a fondo. Era como una exprimidora esta mujer.
Y pasaban los días y Zulma ahí estaba, en la última puerta del pasillo del sector depilación de la peluquería BEAUTY logrando que todas las mujeres se desnudaran en cuerpo y alma. Y así fue como se enteró todo el barrio del aborto de Nancy, del nieto drogadicto de Lily, del gato muerto que guardaba Pelusa en su armario, del affaire entre Georgina y Fermín, el kioskero , de los laxantes que tomaba Moria para estar flaca, de la herencia que le cayó del cielo a Susana y tantas cosas más. En general, contaba las cosas más trágicas. Y luego la gente comentaba lamentando, felicitando, envidiando o castigando al protagonista del chisme de turno.
Pero todo cambió aquel día. Zulma estaba más histriónica que de costumbre, olía mejor y todo. Cantaba. Llegó temprano y atendió a su primera clienta, la que le confesaba cada golpe de su esposo. Se entristeció un poco, pero siguió cantando. Luego vino Claudia, pintarrajeada como una puerta a las 10 de la mañana y le pidió que la deje hecha una reina. La estaba retocando con la pinza cuando cometió la imprudencia. Su boca la traicionó y así, sin más, le espetó a la mujer del dueño de la peluquería lo bien que había estado su marido en la cama la noche anterior.
Y el final fue triste. Porque Claudia salió hecha una loca y no pasó ni una hora hasta que Zulma se enteró de que estaba en la calle. El dueño desmintió todo y la acusó de fabuladora descarada. Entonces Zulma no tuvo más remedio que abandonar su trabajo y mudarse de barrio. No quería sentir las miradas ni escuchar ningún juicio sobre su propio rumor. Prefirió que la gente la recuerde bien, como la mejor depiladora y el mejor oído del barrio de Chacarita.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Peculiaridad

Hoy estamos viviendo un día par, de un mes impar, de un año par, porque es bisisesto.
¿Habrá alguna ocasión extravagante esperándonos al final del día?
Y si no, la ocasión la fabricamos nosotros pero no porque sea un día par de un mes impar de un año par, si no porque es un día más en nuestras vidas, un día más que no se va a repetir y que nos pide que le demos color y que no tengamos reparos en hacer lo que nos viene en gana.
Yo por mi parte desayuné un colacao (nesquik version española) delicioso para cargarme de energía y disfrutar de un día peculiar en los Madrides.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Yo, crítica


En estos días vi dos pelis españolas altamente recomendables.Una se llama Cándida y es la ternura peliculizada. Es la señora que todos queremos en nuestra casa, pero no para que nos limpie, si no para que nos hable y nos contagie su mirada del mundo. Es la viejita honesta y bondadosa que entra en el corazón de todas las personas. Detalle no menor: la protagonista de la historia es la verdadera Cándida, la de carne y hueso. Y el director, Ferrer, la conocio porque ella trabajaba en la casa de sus padres y se enamoró de la señora. De este magnífico personaje que es puro corazón y dulzura. Habría que verla un día donde estemos mas bien desanimados porque todos nuestros problemas se reducen y toda nuesta admiracion brota para abrazar a la empleada y abuela más cándida -nunca mejor dicho- del mundo.

La otra peli es Una Palabra Tuya y acabo de verla. Bueno. Empiezo por decir que es triste. Trata sobre la vida de dos amigas envueltas en la soledad mas dura y los acontecimientos en los que se enrollan son tragicomicos pero creo que mas tragi que comicos. Una de las dos es revoltosa y simplota, la otra es más rebuscada y correcta. Juntas se entienden mejor que nadie. El pasado de ambas está presente en cada paso que dan. Hay que llevar esas historias en una misma...."joder macho" Imaginen una vela a punto de apagarse, así es como sentí cada segundo de la peli. Pero no digo más, solo que es una adaptación de un libro y que si la ven tengan un carilina a mano. Para el momento de verla y para cuando se termina. Por lo menos a mi, me removió muchas cosas pero sobre todas: la amistad, el amor a mi madre y la soledad absoluta. Ah! prohibido mirarla si estás en un mal día. Podés hacerte pedazos.
Si las ven, luego me comentan. Merecen la pena. Son unas perlas brillantes :)
Citemos a Cándida:
" No hay que tener vergÜenza de decir las cosas bonitas porque bastante feo está el mundo para estropearlo nosotros"
Citemos a Milgaros, una de las dos protagonistas de Una Palabra Tuya:
" Tú buscas en la gente una perfección que no existe, y la primera que no la tienes eres tú"

De noches románticas

Velada adorable de auténticos besos
que prefiero guardar
en mis venas jóvenes
en mi alma diáfana
y que algún día,
por obra de una de estas brisas fortuitas,
se abran a mi cuerpo
y acaricien mi cara,
para recordarme,
entre cosquillas,
que hubo noches largas
donde sólo nuestros labios
reinaban en el mundo.

Mi retrato


Así me dibujó mi novio el otro día. Gracias Ga!

martes, 2 de septiembre de 2008

La chica a mi lado

En tus ojos
la inmensidad del mundo
En tu rostro
toda tu persona.
Tan bella
Tan adorable
Tan estrella fugaz
Entonces decidí esperar
Entonces, no renuncié
A tu piel de vainilla
A tu boca de miel
A tu pálida frente
A tu voz de papel.
Me quedé contigo
susurrándote,
entre sábanas blancas
y perfume holandés,
que me diste la vida
muñequita fatal
que embriagaste mis días
con tu risa de sal.
Que aquel cuerpo dormido
que en mis brazos está
es el suave veneno
que me va a asesinar.

jueves, 28 de agosto de 2008

VENGA ESPAÑA!

LO QUE AMO DE LOS ESPAÑOLES Y DE ESPAÑA
- Que digan las palabras “ mola” y “mogollón”
- Que no usen la bocina
- Que haya 2.564 feriados por año
- Que lleguen tarde a laburar y se vayan temprano
- Que tengan un mes de vacaciones
- Que pongan 18 bares por cuadra
- Que haya lugares como el circulo de bellas artes, la casa de América y la casa encendida, y tantos otros sitios culturales bonitos y GRATUITOS
- Que las bibliotecas sean tan completas y ofrezcan cursos gratuitos
- Que haya tantos parques verdes y bien cuidados
- Que el abono del metro me sirva para el autobús
- Que lleven carrito de vieja de barrio para hacer las compras
- Que haya verdaderas rebajas donde podes conseguir remeras a 1 euro
- Que haya una familia real y que me caigan bien
- Que en vez de gente buena onda exista gente maja
- Que dejen los muebles que no usan más en la calle y que se los lleve cualquiera!
- Que camines y te encuentres con fachadas del 1600
- Que la seguridad social sea gratuita para cualquier empadronado
- Que te sorprendan actividades culturales de todo tipo en todos lados
- Que consigas pasajes tan baratos para viajar por Europa
- Que currar signifique trabajar
- Que pija signifique cheta
- Que hagan botellones en todas las plazas
- Que en verano sean las 10 de la noche y haya sol
- Que de los 12 ministros 9 sean ministrAs
- Que no me pidan plata por la calle
- Que tengan el Mar Mediterráneo e islas paradisíacas

LO QUE ODIO DE LOS ESPAÑOLES Y DE ESPAÑA
- Que no se saluden con beso en el ambiente laboral
- Que de 2 a 5 de la tarde se pare el mundo
- Que sean tan literales
- Que no sepan indicar ninguna dirección
- Que “ la mañana” dure hasta las 2 de la tarde
- Que digan ingle en vez de cavado, y “brasilera” en vez de media pelvis
- Que tengan cantos tan nefastos para festejar un triunfo futbolístico
- Que paren el auto donde se les dé la gana y no se inmuten si atrás hay alguien esperando
- Que cuando digo cashe no me entiendan
- Que hablen tan mal en ingles. Se dice spaiderman, no espiderman. Y donat, no donut. Y aftersan, no aftersun. Y aisberg, no iceberg.
- Que cuando te saludan “que pasa” signifique “que tal”, porque siempre me olvido y pienso que son violentos de entrada
- Que no existan video clubs ni radio taxis ni deliverys
- Que todas las películas estén dobladas al español
- Que le digan chuches a las golosinas y mantequilla a la manteca
- Que le digan tripa a la panza
- Que no haya cuadernos rayados!!! Todos son cuadriculados, que crueldad.
- Que en vez de indicarte por cuadras te indiquen por "tantos minutos andando"
- Que este a 12.000 km de mi país

miércoles, 27 de agosto de 2008

Si

Si el pasto fuera celeste
Y el cielo de un verde color
Si hubiera mas esperanza
Si hubiera menos rencor
Si alguien gritara en silencio
Si alguien cantara sin voz
Si una guitarra sin cuerdas
Sonara al compás de un tambor
Si no cesara la lluvia
Si fuera eterno el dolor
Si un duende me hablara en mis sueños
Y me dijera quién soy.
Si fuera capaz de volar
Subir a una nube y tocar
La luna y alguna estrella
O todo el sistema solar.
Si el viento me hablara al oído
Si el cuerpo pudiera flotar
Si el alma de todos los hombres
Pudiera cantar y bailar.
Si el sol bajara algun dia
Si el aire pudiera tocar
Si cada gota de lluvia
Fuera una flor para dar.
Si al mundo le diera la gana
Y pare ya de girar.
Si cada persona mañana
Dejara de respirar.
Espero tenerte a mi lado
Poder abrazarte y mirar
Tus ojos que brillan tanto
Tu boca, jacarandá,
Decirte cuanto te amo
Y ¡ay! Poderte salvar.

lunes, 18 de agosto de 2008

Jesús María

Era inevitable. Mi mamá y sus 4 hermanas habían ido a ese colegio, mi abuelo había sido el único profesor varón en épocas antiguas. Vivía a 4 cuadras. No había forma de no ir al colegio de Karina Rabolini, de la hija de Carlitos Balá. Y de Palito Ortega. Asique así fue que mi mamá me llevó de la mano a mis 5 añitos para que me hagan el test pertinente para ingresar al colegio Jesús María.
La señora psicopedagoga, supongo, me dio un dibujo de un perro. Era la última prueba y ya venía mal. Y eso que yo había aprendido a leer a los 4 años, solita. Pero se ve que la tipa no me inspiró confianza porque casi ni abrí la boca en todo el test.
- Qué es esto Macarena?
- ….
- Pensá Maca, que animal es?
- …..
- Bueno. Concentrate.
- …..
Y nada. Entonces mi mamá se agacha, muy poco disimulada, y me dice al oído y en voz baja: Uau, Uau.
Qué vergüenza la de mi madre. Su hija mayor resultó ser un desastre. Pero habría otra oportunidad a la que concurriría con mi papá, visto y considerando que mi madre no se controlaba.
- Bueno, Maca. Acá tenes un papel en blanco. Tenes que dibujarme un sobre. Podés empezar.
Y yo dibujo un mamarracho. Y papá se habrá puesto más colorado de lo que es. Y la tipa habrá suspirado. Y a los pocos días era la devolución. La señora les dice a mis padres que bueno, que mejor esperar un año mas, que Maca está un poco inmadura para ingresar a primer grado este año, pero que no se preocupen, que seguro madurará pronto y que me esperan el año que viene con los brazos abiertos y las monjas sonrientes.
Yo creo que mamá debe haber llorado. A sus 27 años estaría sufriendo de estrés por mi culpa. Bastante frustrante fue todo la milonga. Así que así fue que la nena repitió preescolar. Menos mal que era de junio. Fui siempre la más grande de la clase pero no era tan grave. Y menos mal que me quedé ahí mismito y que ese marzo de 1990 arrancaron esas enanas que fueron y serán mis amigas para toda la vida.

sábado, 16 de agosto de 2008

Familia se va

Virginia llora a moco tendido.
Marcelo no la consuela. Está como ausente.
Victoria hojea una revista. Lucas otra. Pablo come una papa frita tras otra.
Pasajeros del vuelo 5524 con destino a España por favor, embarquen por la Puerta 6.
Marcelo les dice que no se levanten, que el asiento no se los saca nadie.
Victoria ve que en la fila está Florencia, su compañera de la facultad. Bueno, ex compañera. Automáticamente vuelve sus ojos a la revista. Que fiaca explicarle todo a esta mina.
Suben al avión y se sientan en la fila de cinco.
Virginia sigue llorando pero en silencio. Marcelo apaga su celular. Victoria evita encontrarse con la mirada de Florencia. Lucas mira un punto fijo. Pablo se tapa con la manta y cierra los ojos.
Se ajustan los cinturones.
El avión despega y ninguno se imagina que se llenarán de amigos, que habrá éxitos profesionales y viajes por Europa, que se cansarán de comer paella, que cambiarán el dale por el vale, que se bañarán todos los veranos en el Mediterráno, que se casarán y tendrán hijos españoles, que van a enamorarse tanto de España que ya no volverán a vivir en Argentina.
Mientras la azafata señala las salidas de emergencia todos piensan en todo lo que han dejado en su país. Marcelo piensa en su viejo y en los asados de los domingos, Virginia en los muebles vendidos y en sus hermanas, Victoria en las chicas y el pibe del sábado, Lucas en el equipo de fútbol y en Pinamar 2003, Pablo está en su quinto sueño. Todos parecen idos.
Una de las azafatas pasa caminando por el pasillo izquierdo controlando que todo esté en orden y cuando llega al fondo le comenta a una de sus compañeras: “Qué cara de culo tienen los de la fila H”.

martes, 12 de agosto de 2008

Un rato más


Te abrazo y te pido

un rato más

Te suelto y te miro

un rato más.


Te mojo en mi llanto

un rato más

Te ruego, furiosa

un rato más


Te vuelvo a abrazar

Te vuelvo a mirar

Te vuelvo a mojar

Te vuelvo a rogar

No te mueras

Quedate conmigo

Un rato más

Otra vida

Subió los escalones sujetando con fuerza la mano de Inés. Tenía miedo. Pero se distrajo observando el portal y las macetas que le llegaban al hombro. Nunca había estado en un lugar así. Si la fachada era tan hermosa, ¡cómo sería la casa por dentro! En el momento en que admiraba el brillo del picaporte, se abrió la puerta y vio a una señora alta, muy elegante con su pelo tirante y recogido, sus pulseras de oro y su perfume penetrante. La señora se agachó para darle un abrazo y la bienvenida.
Candela entró al chalet nerviosa, incrédula ante semejante lujo. Sin soltar la mano de Inés escudriñó el hall de entrada hasta el último rincón. La alfombra persa, el candelabro de cristal, la cómoda con fotos, el florero, las cortinas doradas, la escalera que se elevaba a su derecha. No prestaba atención a la conversación de las adultas. Quería curiosear el salón que se veía más allá del umbral y el jardín que se asomaba desde el ventanal del fondo pero se aguantó las ganas y le devolvió la sonrisa a la señora que no dejaba de mirarla. Candela sabía que tenía que hacer buena letra.
Se dirigieron a otro salón y Candela se enteró que eso era un playroom. Seguía sin salir de su asombro. Ya contaba 3 ambientes en la casa. Se hundió en uno de los sillones y escuchó lo que ya sabía que iba a escuchar.
Cuando dijo que sí por cuarta vez, que estaba segura, Inés la besó en la frente y le acarició el mentón. Candela se había encariñado con esa mujer que se encargaba de ella desde que pasó lo de su mamá, así que asentía más que por propio convencimiento por no defraudarla.
Inés se marchó y Candela sorbió el fondo de la chocolatada, haciendo ruido y llamando la atención de la señora que soltó una risita simpática. Luego Liliana, la señora de la limpieza, la cargó la valija y subieron a lo que era su habitación. Candela no daba crédito. Esa sería su cama de ahora en más. No estaba acostumbrada a un colchón tan grueso, a tantos almohadones y a unas sábanas tan suavecitas.
Esa noche y todas las que siguieron Candela abrazó a Tato, el oso que fue el último regalo de su mamá y se durmió pensándola. Una lágrima cayó sobre el peluche.

Me dueles ángel

Eras como un ángel,
con las alas rotas,
con el tiempo dormido,
la pena en el alma
y el dolor en tu abrigo.
Si pudiera curarte,
muchacho bondad,
si pudiera tenerte.
Te daría otras alas y otro cielo,
limpiaría tu alma,
besaría tu duelo,
dejaria en tus ojos
la palabra tequiero.

martes, 15 de julio de 2008

Cumpleaños terminal

Cuando era chica bailaba, ahora ya no porque el juanete se lo impedía. Se vestía con polleras largas y sandalias rústicas. Siempre floripondia y llevaba el pelo suelto. A los 20 años pintaba y todavía tiene algunos cuadros. En esa época viajo a Europa donde conoció a Horacio, un jovencito español que fue su marido durante más de tres décadas. Vivió siempre en Bahía Blanca y también ahí nacieron sus hijos. Dio clases de francés toda su vida y sus alumnos la adoraban. Se murió Horacio hace 8 años y desde ese día reina la música en la casa. Y ella canta, y todos los vecinos se ríen y la quieren más aún. Un personaje Marga, la verdad.
El día de su muerte fue también el día de su cumpleaños número 74. Despidió a todos los invitados y se sentó en su butaca nueva mirando al balcón. Cerró los ojos y se tocó con una mano la cara, sintiendo las arrugas en su piel. Luego bajo la mano hasta su pecho, obsoleto, y suspiró. Se miró las manos, las venas como muy salidas. Y se levantó. Fue al baño y vio su imagen en el espejo. Se dio cuenta que ya no era vieja, sino viejita.
Volvió a sentarse en la butaca pero con una ropa distinta. Tenía puesto el vestido azul clarito, muy gastado, que le había regalado Horacio en uno de sus cumpleaños. Siempre apreció ese vestido. Derramo dos lágrimas. Es que estaba recordando momentos de su vida que la habían hecho feliz. Estaba sola y de fondo se escuchaba la voz de Violeta Parra, pero bajita.
Y sintió la puntada de repente y se venía el infarto. Pero alcanzó a llamar a Carmina, la del sexto. Y luego todo pasó tan rápido. Vecinos, ambulancia, batas blancas, hospital. Todo se le mezclaba a la pobre Marga. La ingresaron en terapia y estaba pálida. Ya ni fuerzas tenía. Pero al rato vio que llegaba Guillermo, su hijo menor, con cara de miedo. Trató de esbozar una sonrisa y de parecer lo menos moribunda posible pero estaba muy débil. Igual miró a su hijo a los ojos y le transmitió una especie de paz.
En el mismo momento en que sus hijos se enteraban de la noticia, Carmina hacía todo tipo de preguntas en la sala de espera, sus nietos les preguntaban a sus mamás por qué papá se va a estas horas, Gaspar, su vecino de arriba la lloraba en silencio y todos los demás hablaban a los gritos en la planta baja, había dos que rezaban un rosario, otros tres que discutían qué tipo de arreglo floral encargar, y las hermanas Alonso que estaban aisladas y mudas en estado de shock. Y estaba Claudio, el encargado del edificio, que se preguntaba a dónde se iría la alegría.
Cuando por fin estaban sus tres hijos dentro de la habitación, Marga los llamó despacito y les dijo: "Ya estoy bien. Ya me estoy yendo. Solo les pido que me dejen el vestido puesto y que en mi entierro no se vistan de negro. Quiero que me recuerden con colores.”

sábado, 12 de julio de 2008

Greedy Gary

Don´t leave me, Greedy Gary,
my heart will still be yours.
I´m crying, Greedy Gary,
I don´t want to be alone.

Forget about the mess.
Forget about that day.

Forgive me, Greedy Gary,
my feeling is regret.
Forgive me, Greedy Gary,
I´ll try to do my best.

Lazy Liza

I´m leaving, Lazy Liza,
my soul is not in peace.
I´m leaving, Lazy Liza,
my love is not the same.

Don´t be upset.
Don´t cry a sea.
Don´t try to find me, Lazy Liza,
Don´t call my name.

You´ve hurt me, Lazy Liza,
I´m going far away.
Remember, Lazy Liza,
forget me and let me live.

martes, 10 de junio de 2008

La chica del rodete

Se hartó del olor a acrílico penetrante y de los alumnos de pintura de su madre que entraban y salían y molestaban. Entonces cogió sus resúmenes y sus apuntes, el estuche nuevo y se fue, por primera vez, a la biblioteca.
Mariano tenía que preparar una materia clave en su carrera: Estadística Aplicada. Y le costaba bastante concentrarse. Sentado en la cabecera de la última mesa, al lado de la ventana, pensó que aquel edificio imperioso por fuera y silencioso por dentro, era el lugar ideal para aprender de una vez por todas de que se trataba esto que parece tan jodido.
Venía bien los primeros días. Llegaba religiosamente a las 3 de la tarde y nadie intercedía entre su mente y las hojas que tenía en frente. Además, estaba equipadísimo. Su novia le había regalado resaltadores de todos los colores, lápices de mina, regla, biromes de repuesto y hasta liquid paper. A ver si con esto te inspiras gordo, le había dicho ella con esa cara que delataba todo lo que le irritaba la prolongada inestabilidad facultativa de su novio y futuro marido.
Pero todo empezó a desacomodarse cuando la vio. La chica del rodete que se sentaba en la tercera mesa empezando por la izquierda, era magnifica. Por su forma de vestirse, sus uñas despintadas, su cara lavada y su bolso colorido, Mariano sospechaba que la chica era más bien intelectual, bohemia, más bien estudiante de letras. Y lo cierto era que la sola presencia de la chica del rodete era mucho más fuerte que el olor a pintura y el impedimento para concentrarse mucho más grande.
Pasó naturalmente de la siguiente manera: la primera semana la detectó, la segunda la miró mucho y la tercera se desespero de amor. Habían tenido un único contacto la vez que Mariano lanzó disimuladamente uno de los resaltadores cerca de ella para que lo levantara y se lo diera y se miraran, aunque sea. La maniobra era pésima, pero a él le había servido para mirarla a los ojos.
La mañana de la víspera de su examen y con más conocimientos acerca del perfil de la chica del rodete que de formulas matemáticas, Mariano ingresó a la biblioteca. Escuchó detrás de él un ¡Hola! proveniente de la calle y cuando se dio vuelta vio a la chica del rodete que lo saludaba con una mano y con la otra sostenía la correa para que el bulldog no se mueva tanto. ¡Nos vemos en un rato! ¡Como siempre! Le dijo sonriendo.
Mariano, muy mal, sonrió apenas con una mueca bajando la cabeza. Subió la escalera principal puteándose para sus adentros. Ni se percató de lo tierno del gesto, de la simpática sonrisa de la chica del rodete. Se sentó a estudiar sabiendo que lo único que quería era verla llegar.
Apareció a eso de las 5 de la tarde, luminosa, y lo saludo desde su mesa, mientras acomodaba su cosas. El estuvo mejor, desde el fondo, la sonrisa más amplia. Bajó la mirada sin hacerle caso a sus hojas resaltadas. En cambio, estuvo más de una hora observando ese perfil, pensando en ella, la chica del rodete. Siguió adorándola hasta que vio que ella se levantaba y recogía sus cosas. Se va carajo. Se olvida el paraguas, bien.
Guardo sus cosas, torpemente, en la mochila. Se le cayeron las minas, se le arrugaron las hojas, todo apurado se colgó la mochila abierta, se chocó con la punta de la mesa, pidió disculpas, cogió el paraguas y corrió escaleras abajo, salteándose escalones. La chica del rodete había pegado la vuelta y justo se chocaron de frente. ¡Ay! Empezaron a hablar a la misma vez uno encima del otro, ni se entendían. Perdón, estaba volviendo. Te traje el paraguas. Gracias, que tarada. Menos mal. Todo bien. Trueno.
Estaba diluviando y la gente se acomodaba en la entrada del edificio. La chica del rodete le propuso a Mariano compartir paraguas si es que vas para ese lado y el dijo que sí, que claro, que gracias olvidándose por completo de la estadística aplicada.
Caminaron dos cuadras hablando de los estudios y Mariano metió un pie en un charco. Se empapó. Se quiso morir, por qué soy tan torpe, pero ella dijo que estaría bien entrar a la cafetería de en frente y esperar a que pare un poco.
Se puso feliz y contento Mariano, con su pie ahogado en el mocasín. Entró el primero. Ella vio que se asomaba un paraguas dentro de su mochila abierta pero no dijo nada. Se sentaron en una mesita, esta vez rodeados de gente que sí hablaba. Entonces él la miró y descubrió que tenía hoyuelos. ¡Que nunca deje de sonreír, por favor! Y se dio cuenta de que no sabía su nombre. La chica del rodete cobró más vida todavía cuando mirándolo a los ojos, incendiándolo, le dijo: “Paula”.

viernes, 6 de junio de 2008

La frustración de Pedrito Gonzalez

Era inútil. Pedrito Gonzalez jamás lo lograría. Pasaba lo mismo todos los veranos. Y ahí estaba, sin embargo, paradito al borde de la pileta, los brazos bien pegaditos al cuerpo. Sus puntas de los dedos del pie, dudosas. Había pasado un cuarto de hora y ahí seguía Pedrito, firme y compenetrado, la mirada fija en el agua, hasta que cerró los ojos. Respiró hondo y apretó sus puños. Parecía como si estuviera rezando por todos los habitantes del mundo. Y abrió sus ojitos, bien grandes. Ese ruido era su mamá.
Gloria acababa de apagar el motor del auto cuando se apareció Pedrito. Le pellizcó, como siempre, los cachetes y le pidió que la ayudase a sacar las compras del baúl de aquella inmensa Zafira. Ahí fue que Pedrito se enteró del asado que se estaba por celebrar en su casa para agazajar a los Medrano, a los Alcorta y a los Medina Sanz.
¡ Estúpido, estúpido, estúpido!, pensaba Pedrito mientras su madre le daba las bolsas no tan pesadas y el pack de latas de cerveza, a la vez que le decía ponete contento che, que vienen Joaquín y Gonzalo y las mellis Medrano.
Dejó Pedrito los bártulos en la cocina y entró al toilette, al lado de la escalaera. Se miró fijamente en el espejo. Idiota. Casi que se le llenan los ojos de lágrimas, pero no: Idiota y encima maricón ya era demasiado. Se distrajo porque escucho la puerta de entrada abrirse y el grito de su papá: ¡Buen dia familia! Y para cuando Pedrito salió del baño ya estaba su padre nadando en la pileta. Y claro, después de una mañana de Golf intensa y de un próximo almuerzo multitudinario donde era él el asador, necesitaba relajarse en la pile, pensó Pedrito.
Entre la 1 y la 1. 30 de la tarde fueron llegando todos los invitados con botella de vino unos, helado de Freddo otros y masitas para el café los últimos. Los niños ni lo dudaron. Se quitaron sus ropitas, las dejaron desperdigadas por el pasto y ¡plaf! se tiraron a la pileta, esquivando las palabras de sus madres: ¡el protector, todavía no te puse el protector!
Ni caso. Ahí estaban todos, bañándose a los gritos, fanáticos. Pero la felicidad alguna vez se termina, Pedrito. Y mientras adoraba las patas flacas de Lucía que hacía la vertical submarina, pasó lo tenía que pasar. Joaquín hizo el salto mortal, perfecto, y en frente Gonzalo se lanzó al agua, perfecto también con otra mortal impresionante. Se tiraban, nadaban hasta el borde, trepaban y se volvían a tirar. Pedrito salió del agua y corrió antes que se dieran cuenta, al baño, dejando sus huellas mojadas.
Nuevamente frente al espejo, odiándose. ¡ Ayyyyy! Qué tonto era. Se contuvo las lágrimas por segunda vez en el día y salió cuado escuchó la voz de su madre. ¡ A comer!
Durante el asado los niños masticaban sus patys y mucho no hablaban. Pedrito ya estaba pensando en el segundo chapuzón después del asado, en cómo evitar la mortal, en la excusa más factible, en que Lucía no se percatara de lo estúpido que soy y los chicos tampoco, para que no me burlen, en cualquier cosa que disimule el fracaso más grande de su vida. Muy preocupado estaba Pedrito.
Y de repente apareció Sucrán, el perro de los vecinos, en busca de su ración habitual. Los padres interrumpieron su charla sobre el nuevo socio del club que poco entendía de Golf pero mucho de negocios, para darle al perro un chorizito sobrante y bastantes huesos. A lo lejos divisaron a Miguel, sin duda en busca de su mascota, y empezaron a llamarlo. No hay caso, esta cada día mas sordo este tipo. ¡ Migueeeel!
Y en ese momento pasó lo que Pedrito no se temía. Gonzalo se puso dos dedos en la boca y chifló. ¡Qué potente el chiflido! Obviamente que Miguel se volteó al escucharlo y obviamente que Lucía miró a Gonzalo, encantada, admirándolo. Y Pedrito vio como su hermana le tocaba la pierna, como entendiéndola. Entonces, se excusó y se dirigió al baño.
Otra vez su imagen en el espejo, estática. Trató de chiflar. Olvídalo Pedrito. Lo tuyo es silbar, lo tuyo es tirarte de palito. Se rindió. Bajó la tapa del inodoro y se sentó encima. Qué duro era tener que asumir un segundo fracaso en el mismo día. Y ahí no más, encerradito en el toilette al lado de la escalera, Pedrito Gonzalez, con 10 años encima, pensó que no servía para nada. Y esta vez sí que lloró.

viernes, 30 de mayo de 2008

Bolivia sin tí

Ella andaba, bolivianisima andaba, llena de preocupaciones. Cargaba una raqueta de tennis y una mochila de High School Musical. En su mano la manita tan blanca, tan pequeñita de Luisita. Hacía calor y sus preocupaciones parecián más pesadas, como que se le acumulaban toditas todas en la parte frontal de la cabeza, justo en la frente. Y sudaba. Luisita, siempre preguntona, atacaba indagando sobre Ayelen y Julito y cuando vendran, a que se la van a pisar pipa cuando lleguen, podrán jugar al tennis conmigo, puede dormir Ayelen en mi cuarto y más y más y más preguntas.
Llegaron las dos, finalmente, al Club de Campo Villa de Madrid. Luisita cogió su mochila y salió disparada por el caminito adoquinado, el principal, bordeado por acacias y esos arboles inmensos que huelen tan bien. Sonó el móvil. Era la señora que quería saludar a la nena y recordarle que hoy no podía quedarse jugando con sus amiguitas del club, porque mañana tiene un examen muy importante ¿comprende Isabel?. Sí, señora, comprendo. La chola corrió, le pesaban sus 92 kilos, su trenza larga y espesa y el rayo del sol era fulminante, toda ella empapada en sudor. ¡Luisita, Luisita, tu mami te quiere hablar! La alcanzó cuando estaba ingresando al vestuario de niñas.
Mientras la niña jugaba su partido con el profe Michael y sus compañeritas, Isabel charlaba con las otras cuidadoras. Estaban sentadas en sillas de plástico blancas a la sombra de un roble gigante. En realidad, Isabel no conversaba. Ella estaba presente pero no participaba porque su cabeza era un ir y venir de cuestiones que no la dejaban en paz. Si Ayelen pudiera conseguir otro trabajo en Pucaraní. Con un buen sueldo más el dinero que yo le envío...Ahi sí que podría ahorrar unos cuantos bolivianos y comprar un pasaje de esos baratos. ¿Pero y Julito?
Su hermana no tenía buena voz cada vez que hablaban. El niño no andaba bien. Isabel lo escuchaba lejano, casi irreconocible. Quizás se había vuelto tímido. Es que ya habían pasado 2 años. ¡ Pobrecito ! Su hermana decía que el muchachito se ponía pálido y vomitaba frecuentemente. Ayelen le contó que Julito andaba bizqueando, pero mucho más no decía. Seguramente para no preocuparme, pensaba Isabel. ¡ Cómo se le estrujaba el corazón y se le fruncía el ceño a Isabel! Se tapó con las dos manos la cara y disimuladamente, se enjugó las lagrimas. Algo tenía que hacer.
Ya eran las 6. Luisita fue corriendo hacia donde estaba Isabel. ¡ Le pegué 3 veces de revés, 3 veces Isa! La niña, coloraditos los cachetes, saltaba de alegría. Isabel le dio un besazo en la mejilla rojiza y le acomodó el peinado. Salieron enseguidita y cogieron un taxi. ¡ No quiero estudiar Isa! ¿ Y si me hago la enferma? Todo el trayecto estuvo Luisita clama que te clama con ocurrencias disparatadas para esquivar el estudio de los planetas. Llegaron. ¡Hola cariño! Anda, sube que ahora Isabel te va a dar un baño y luego bajas para estudiar vale? Pero mama. Anda cielo, ve.
En la bañera, Luisita se quejaba. No había podido contarle a su madre lo de los 3 reveces. ¡ Mi madre casi ni me dejó hablar! Isabel, con la cabeza en otro lado, seguía fregándole el cuerpecito con la esponja. Ya limpita y perfumada y con su pijama preferido, Luisita bajó, protestando.
Antes de que entrara al escritorio del señor, Isabel le pidió a la señora salir un ratito a hacer una llamada. Claro Isabel, vaya, vaya. Esta muy rara esta mujer, como ida últimamente. ¡ Vaya uno a saber!
Isabel entró al locutorio más cercano y marcó su teléfono, llena de palpitaciones. Atendió Ayelen. Que que bueno que llamas mamita, que tengo una buena noticia, que he conseguido un trabajo muy bueno mamita, en en La Paz mamita, me mudo a lo de la tía Eugenia, si, tareas administrativas dicen que es, estate tranquila, que ahora tendrás que eperar 6 mesesitos no mas y ya estamos ahi con el Julito, que todo esta bien mamita. Isabel lloraba de la emoción, sonreía y lloraba. Salió feliz, y encantadora se soltó la trenza, como si los problemas se fueran también al desatarla.
Se acordó que en agosto cobraraba su aguinaldo. A lo mejor en 4 meses pueden estar aquí.Pensó en Julito. ¡ Aqui en España opdría acceder a la seguridad social gratuitamente! Ya se iba a corregir su extravismo, ya se le irian los vomitos y la palidez. Caminó con prisa. Abrió la puerta de la casa tan paqueta y Luisita salió a su encuentro. ¿ Tú estas bien Isa, verdad? ¿A que te encuentras bien no? La niña no soltaba la pierna de su cuidadora.
¡Hombre, claro!, dijo Isabel y miró a la señora, parada en el medio de las dos puertas corredizas que separaban escritorio y hall principal. La señora sonrió, inocomoda. ¡ Mis niños llegan en menos de 6 meses! Luisita abrazó con fuerza la pierna. Isabel se agachó y le dijo: ¡ Por fin los vas a conocer, mi niña!
Y le besó la frente.

domingo, 18 de mayo de 2008

Invierno crítico

Volvió a bajarse el gorro de lana para que le tape mejor las orejas. Buscó en su cartera una carilina. Ya era la quinta que sacaba y le quedaba sólo una. "Mas vale que llegue ya", pensó mientras se sonaba los mocos.
Vista desde la acera de en frente, aquella jovencita era un pequeño cuerpecito anudado y refugiado en la parada del 152. La gente, sin embargo, andaba sin mirarse, mezclándose con la otra gente, cada uno inmerso en sus pensamientos, planes, problemas, y todo tipo de individualismos. Todos iban abrigados. El termometró debería estar marcando 6 grados en esa tarde del mes de julio.
Clara no llevaba reloj pero calculaba unos 20 minutos desde que llegó. Se había olvidado su libro en casa de Manuel y no tenía con qué distraerse, asique se fue adentrando en los últimos acontecimieintos de su vida, en aquella montaña rusa imprevista en la que estaba metida.
El cuarto "bochazo" de su carrera la tenía bastante preocupada, pero lo que más la angustiaba era la situación socio-económica por la que estaba atravesando. ¡Eso sí que era un contratiempo! Su casa estaba por ser entregada a sus nuevos dueños (que odio les tenía, apropiarse de su hogar), su padre todavía seguía desempleado, su madre retomó su vieja labor de costureraenmiendoloquesea para dar una mano, su hermano, siempre ajeno, disfrutaba de su nueva vida en North Carolina y ella, Clarita, había empezado a trabajar como recepcionista en un consultorio médico porque ya no era posible pedirle dinero a papá. ¡ Y pensar que hace unos meses se paseaba por esta misma calle en su Hyundai azul marino con vidrios polarizados!
Una señora gorda, de tobillos anchos y zapatos gastados se sentó a su lado. Llevaba guantes violetas y un saco a cuadros de gabardina estropeada que le llegaba hasta los anchos tobillos. Se veía arrugada, cansada, perdida y olía a producto de limpieza.
Pensó en Marina, su vecina de toda la vida. Trato de imaginarsela sentada en el medio de ellas dos. Imposible. Marina era distinta. Con sus botas de gamuza, sus aros de perla y sus uñas perfectas, Marina jamás se subiría a un colectivo. De hecho, no le gustaba rodearse de personas que sí se subían a ellos. Hace unos meses, desde la repentina decadencia ecónomica familiar, sus gestos eran más forzados, sus miradas más esquivas y sus saludos menos frecuentes. ¡Qué estúpida frivolidad la gobernaba!
Clara estaba pensando en todo lo que rescataba de este cambio abrupto en su vida, en los buenos amigos que había hecho durante este tiempo (Manuel era uno de ellos, o más), en...llegó el autobús. Sintió el calor de los cuerpos al subir y encontró un lugar al fondo. Le quedaban 40 minutos de viaje y sabía que su mente también iba a viajar. Empezó a cavilar sobre el estilo de personas Marina Suarez Rey y el estilo de personas como la señora del saco cuadriculado y los guantes violetas que olía a producto de limpieza.

sábado, 17 de mayo de 2008

Susana Salada

Susana protestaba. Su jueves había sido fatal. El principal motivo era: madrugar un feriado. En Madrid se celebraba San Isidro y las calles estaban desnudas. Encima había mucho viento. (¿Por qué hace frío en mayo?) Se dirigío a la casa de su primer alumno: Corentin. Aquel niñito francés de 6 años de edad era una efervescencia dulce y a la vez, insportable. Luego de soportar una hora y media de lectura, pronunciación, horcados, abrazos violentos y payasadas multiples, Susana partio a Las Rozas donde la esperaban no un niñito de 6 años, sino una docena de niñitos de 6 años, de caritas expectantes, alaridos constantes y una hora para lograr entretenerlos en su clase de inglés. Claro, en la periferia de la ciudad no se celebraba al santo Isidro. La dinámica surtió efecto y los niños estuvieron participativos y equilibrados. Afortunadamente, el autobús no tardo en llegar y allí Susana durmió la siesta que se merecía. Había dormido 4 horas. Su novio, Luis, la había despertado esa madrugada, nauseabundo y un poco afiebrado, asique partieron al hospital más cercano donde le hicieron el electrograma y las típicas preguntas pertinentes. Tiene diarrea, cuántos vómitos, qué temperatura, dónde le duele y lo que sigue. Se despertó en el intercambiador de Moncloa y tomo el metro, 9 estaciones hasta Diego de León, que le sirvieron de repaso para la clase que le esperaba. Leyó las hojas que había preparado para Bacilio, el jovencito de patillas largas que espera aprobar el examen de la semana próxima en la Complutense. Otra hora y 30 minutos, pero llevados de otra manera. Esta vez no había que imponer autoridad ni corregir con marcador rojo y caritas felices. Esa noche, aceptó ir a las Vistillas y cansinamente, partió con Luis y el padre de éste. Anduvieron a paso lento por la peatonal que abarca el Palacio Real al costado y llegaron cuando el concierto había terminado. Había resabios de figuras juveniles con cerveza en mano y mucho olor a porro. Una lástima perderse a la banda musical...
Pero el viernes sería otro día y tambien habría celebraciones y música por doquier. Recuperada y ya despojada de clases, Susana se pasó el viernes caminando por la Gran Vía, visitando librerías, bibliotecas y tiendas diversas. En la calle Orense visualizó un Starbucks y se detuvo. "Hoy es el día", se dijo para sus adentros. Ya habían pasado 5 meses desde su llegada a España y todavía no se había dado el gusto de tomarse el café más delicioso de todos los tiempos. Pagó 4 euros, 40 centimos por su café caramel medium size y espero a que la llamen por su nombre. Inhalo el aroma, y se fue sin probarlo, encantada de llevar en sus manos aquel café portatil. Orgullosa de merecerlo. Entró en la casa de su suegro, a 30 metros de la cafetería. Allí estaba su novio, instalando la nueva biblioteca del escritorio de su padre. "Mirá lo que tengo", le dijo Susana enseñandole el vasoimagenvisual de la compañía. "Habra azucar, verdad?, preguntó ansiosa Susana. "Como no, en la cocina", dijo Enrique. Con mucha ilusión, le echó una gran cucharada y sorbió. Le subió el vómito y escupió el glorioso café de 4 euros, 40 centimos en la pileta de la cocina de sus suegros. ¿Cómo podía ser posible que le hubiera echado sal en vez de azúcar? Miró el vaso, lleno, casi intacto. ¡Que ironía! Ahí quedo su recompensa, su ilusión, completamente salada.
Por la noche comió pizza y partió denuevo a las Vistillas. ¡Esta vez si! El escenario ya estaba vacío pero la gente se multiplicaba por las escaleras y la plaza y el pasto y la fuente. Se encontró con amigos, conoció gente nueva, bebió cerveza y mojito cubano (¿cubano?), bailó al son de trompetas rimbombantes y tambores y agitaciones de cuerpos aledaños. Sonrío para la foto que le estaba por hacer Luis. Fue un viernes festivo y simpático. Atrás quedaba el maldito english coffee con sabor a sal y caramelo.

viernes, 18 de abril de 2008

Je aime

el olor a jazmín
las zapatillas cómodas
la música de Kevin
las frutillas con naranja y azúcar
las caricitas en el brazo
la calabaza
el queso con tomate y albahaca
la voz de Male
las calles de Madrid
andar en bici
los regalos inesperados
las yapas
los libros de Bryce
los lindos gestos
mi vestido de flores
las nubes
el te de frutos rojos
la prosa de Julio
las risas ruidosas
la tarta de puerros de Cata
la gente que se tropieza en la calle
Fito Paez
las ocurrencias de Lowli
caminar de la mano
tener tiempo
mirar las estrellas
los días nublados
el osorno
los ojos grandes de los bebés
el teatro mágico del metro
las fotos polaroid
las viejitas perdidas
mi almohadón "Perla"
los garabatos
las historietas de Liniers
mis pantuflas de pelos jujeños
ver patinaje sobre hielo profesional en la tele
Iruya
mi ex muñeca "Ilse"
las suricatas
la música improvisada
las lágrimas de emoción
la soledad
la lectura
la orilla
el mar
la palabra "petunia"
el idioma francés
el atardecer
los chiringuitos de Madrid
San Telmo
Mi cuadra de Godoy Cruz
los sueños inexplicables
las papas fritas
ver flamenco
los discos de Jack Johnson
las anécdotas de mi abuelo
los churros en la playa
las personas sanas
amasar
comer afuera
darme un gusto
dibujar
el pasto
los imprevistos agradables
observar a la gente común
bailar en mi casa
los adoquines
los domingos
la carita feliz :)
la literatura latinoamericana
las palmeras
conocer gente nueva
hablar con los niños
estrenar algo
convencer a alguien
cantar
las sonrisas "porque sí"
El amor en los tiempos del cólera
las recomendaciones
las paredes coloridas
los niños
los champignones
las bananas con azúcar
el sabor del limón
los emprendedores
las visitas
aprender
escribir

Oh, Granada


Por las calles encantadas
voy andando, sin cesar,
la belleza de Granada
casi no me deja hablar.

There´s a beautiful Alhambra,
con palacios y jardines,
teterías coloridas,
y andaluces muy compinches.

domingo, 30 de marzo de 2008

N A D A



Nothing to say,
this day is my way.
Nothing to do,
sunday is today.
A rainy sunday,
by the way.

domingo, 16 de marzo de 2008

Makpresentation


Esta soy yo y este es mi blog!
Disfruten o no, con estas paginas de tinta virtual.
Hasta ahora colegas!