lunes, 27 de febrero de 2012

Un campeón

Yo jugaba al futbol con una pelota de trapo, papá.
Yo di la vuelta al Estadio Azteca con la copa a cuestas.
La vida es una tómbola, me canta Manu Chao.
La vida te corta las piernas, papá,
Aunque seas Maradona.
Yo fui el barrilete cósmico, ¿entendés?
Yo te hice llorar con la mano de Dios.
Los extranjeros te preguntan: Where are you from?
Y responden Maradona cuando les decís Argentina.
Yo veo mi cara tatuada en tu hombro, pibe
Altares con mi nombre en las calles de Nápoles.
Te lo juro por las nenas, papá,
Yo pasaba hambre.
La fama. La fama te puede cagar a piñas.
No sos Zidane, no sos David Beckham, ¿entendés?
Ni mucho menos Pelé, que debutó con un pibe,
Sos Maradona, papá.
A ver si entendés: mi nombre es una marca,
El diez dejó de imprimirse por amor a mi camiseta.
Cada vez que te enojes conmigo,
Pensá en el 86,
Y acordate de esas lágrimas, papá,
Esas lágrimas que derramaste cuando me viste en la tele,
Dando la vuelta olímpica,
Y pensaste que el fútbol era lo mismo que la felicidad.

1 comentario:

Chule dijo...

muy bueno, Maki.
Beso grande,
Chule!