sábado, 30 de abril de 2011

Gracias Ernesto (y adiós)


"Martín se sentía aislado mágicamente de la dura realidad externa, como sucede en el teatro mientras estamos viviendo el mundo del escenario, mientras fuera esperan las dolorosas aristas del universo diario, las cosas que inevitablemente golpearán apenas se apaguen las candilejas y quede abolido el hechizo y así como en el teatro, en algún momento el mundo externo logra llegar aunque atenuado en forma de lejanos ruidos (un bocinazo, el grito de un vendedor de diarios, el silbato de un agente de tránsito), así también llegaban hasta su conciencia, como inquietantes susurros, pequeños hechos, algunas frases que enturbiaban y agrietaban la magia."

Ernesto Sábato, Sobre héroes y tumbas

jueves, 28 de abril de 2011

Un hada urbana

Ella sueña que una ola gigante la cubre, se acerca y apunto está de atraparla. Ella sueña con tsunamis, siempre. Frunce sus ojos negros, se muerde la boca, sufre cada vez que lo cuenta. No puedo ser tan cagona, dice a cada rato, tan cagona. Pero ella no sabe que al miedo lo combate. Lo combate muy bien con la fantasía. Se va del mundo cuando mira desde la calle, la luna, cuando piensa cerrando los ojos con la cabeza apuntando al cielo: dale, dale, hablame. Se va del mundo imaginando que la realidad puede ser habitada por seres mágicos, por construcciones mágicas, por animales mágicos. Se va del mundo cada vez que canta y sigue venciendo al miedo. Su voz es pura. Es como si saliera un haz de luz de su garganta. Se mueve cantando, con sus pies saltarines, su pelo largo, sus ojos grandes y soñadores. Ella es transparente. Te lo quiero decir, te lo digo, te lo quiero hacer, te lo hago. Ella guarda belleza en el alma y la va traspasando cuando enseña a cantar, cuando habla de cine, cuando te mira, te escucha, te aconseja, cuando actúa sobre un escenario, cuando se ríe echando la cabeza hacia atrás, cuando habla inocentemente. Sus gestos son tiernos y a la vez sensuales. Ella es la Ana de Los amantes del Círculo Polar, ella es la Belisa del Amor de Don Perlimplín, ella es la Cosette de los Miserables, ella es lo más cercano que conocí a La Maga de Rayuela. Ella es tan encantadora que no es de este planeta. Algo me dice que la construyeron en otro lado, que le pintaron de blanco la piel y le marcaron la cicatriz al lado del ojo para subrayar que ella de acá no es, que ella es un hada, aunque use jeans grandes y buzos con capucha, ella definitivamente es una hada que vino a tocarnos con una varita mágica a cada una de las personas que la queremos. Ella es Lucía, o como a mi me gusta decirle: Mandy. Y cómo la quiero.

martes, 26 de abril de 2011

Si después de 8 años de no verte

Alguien te escribe un mail así, es para hacerse pis de la emoción:

Casi que compartimos un suspiro de nuestras vidas, pero tiempo suficiente para saber que sos grosa, te mando un fuerte abrazo, espero sigas teniendo esa sonrisa tan linda que te caracteriza, esa mirada tan profunda y esa tranquilidad que tan bien le debe hacer a quienes reciben tu energía.

Te deseo SIEMPRE lo mejor, sin costo alguno, es un sentimiento sincero y gratuito.

Exitos, te acompaño de la forma en que se puede y se quiere, así, en cuotas y vía mail, pero acompaño.

Que bien que aunque sea una vez tuvimos un tiempo para tomar un cafe en el centro, se ganó mucho, un muy lindo recuerdo.

Sí, hoy me amo y ¿que?

domingo, 24 de abril de 2011

Cuánta razón tenía Shopenhauer

"Un rebaño de puercoespines se apretujaba estrechamente en un frío día de invierno, para protegerse de la congelación con el calor mutuo. Pronto empezaron, sin embargo, a sentir las púas de los demás; lo cual hizo que se alejasen de nuevo. Cuando la necesidad de calor los aproximaba otra vez, se repetía este segundo mal; de modo que se movían entre ambos sufrimientos, hasta que encontraron una distancia conveniente dentro de la cual podían soportarse de la mejor manera."

sábado, 23 de abril de 2011

Los ojos de Diego

Me miraste y dije: alma, dije me llegó al alma, para mis adentros.O no dije nada, lo sentí, lo sentí en serio. Dejaste la billetera de cuero en la mesa, seguiste dejando billeteras en otras mesas y mi amiga me hablaba y yo le dije: la mirada, la mirada de este tipo, ¿la viste? Pero mi amiga no pareció entenderme. Volviste y te dije gracias, son muy lindas y con los ojos me dijiste gracias también y sonreíste, con los ojos. Salí del lugar y me quedé sentada, en la vereda, sobre mi cajón peruano, esperando que me pasaran a buscar. Apareciste. Y tus ojos otra vez. Qué paz la de esos ojos. Me hablaste de música, de tus billeteras, de que mañana en vez del Tigre, ibas a probar suerte en Mataderos, que te echaron de ese lugar de comida rápida, que no te dejaron vender ahí adentro. Tu pelo largo con un poco de canas se movía por el viento. Me tuve que ir. Te ayudo, me dijiste y cargaste el cajón peruano hasta donde estaba el auto esperándome. Me ayudaste. ¿Cómo te llamás? Diego, me dijiste Diego. Y yo te dije mi nombre. Y te despedí con un beso y te deseé suerte. Y me quedé con tus ojos adentro mío. Eran grises medio celestes. Unos ojos transparentes, sencillos, unos ojos en donde me la pasaría nadando, toda la vida, como en el mar. Solo se que sos Diego, que vendés billeteras por el Tigre, que tenés una mirada que atraviesa la piel, que sos bueno, buenísimo, y que me hiciste acordar a él por la mirada profunda, la entonación de las palabras, la calma, la forma de caminar. Muy parecido a él y un poco también a la imagen que yo tenía de Jesús, allá cuando Jesús tenía una imagen en mi mente, allá cuando todavía pensaba en Jesús. Loco que solo sepa tu nombre y quiera correr hasta ahí, donde te dejé, frente al río, a abrazarte.

lunes, 18 de abril de 2011

¡Auxilio Ginsberg!

Dice Fitzgerald que un domingo no es un día, sino una grieta entre dos días. Y no contaba Fitzgerald con un domingo en el que se ve una película como Howl en el que la grieta se profundiza y ya no separa dos días sino que quiebra toda una semana. Howl habla de literatura. Howl es aullido. En 1957 Howl fue un poema difícil, tanto que la obra fue llevada a juicio para que se decidiera la libre publicación o la censura. Palabras obscenas, alegaba el abogado demandante, palabras innecesarias. Y Howl está escrito por Ginsberg que menudito y anteojudo, rasca hasta el fondo sus miedos, observa a los que lo rodean y empieza diciendo: Vi las mejores mentes de mi generación destruídas por la locura, hambrientas, histéricas, desnudas. Ginsberg que desgarra su corazón al apretar las teclas de la máquina de escribir, al leer frente al público su poema sagrado. Ginsberg, que se encierra en Rockland, un manicomio, que ve sufrir a su amigo Salomon, que sale de Rockland con la promesa de ser heterosexual y lavar sus culpas. Grinberg que escribe con Kerouak, que viaja con Cassedy, que se enamora de Orlovsky. Ginsberg y su poema Howl, que finalmente ganó el juicio, que libremente se pudo comprar y pasar de mano en mano. Ginsberg y su exótico mundo beat.
Pensar que Ginsberg estaba inquieto como yo, estaba inestable y se preguntaba lo mismo, que como yo sentía el miedo como un aliento en la nuca, que como yo, hablaba de esto en terapia porque realmente quería escuchar en la voz del psicólogo lo que él sabía que tenía que hacer. Por suerte, él escupió el aullido y se animó a lanzarse. Está claro: Era Ginsberg.
No encontré la escena con subtítulos en español, pero hacé el esfuerzo y mirá que simple es cuando lo cuenta James Franco en la piel del poeta. Y aplica para cualquiera, cualquiera que sepa qué es lo que lo hace feliz y sepa hacerlo y quiera escapar de un trabajo que no hace más que restar. A mi, por lo menos, me hace bien identificarme con el existencialismo de este tipo, aunque sea otra la época, otra la coyuntura, otro el país:

viernes, 15 de abril de 2011

Amor a las 3 de la tarde

Quiero ser la parejita adolescente que está sentada en este momento en la puerta de la casa de enfrente. Los dos riéndose en un escalón de la puerta de una casa, con una cerveza en el medio de sus rodillas, los dos mirándose lindo. La calle y sus adoquines, el cielo nublado, el frío. Ella que se estira la manga del buzo, él que termina de armar el porro. Los veo desde la esquina, camino por la cuadra vacía, por el día gris, toco el timbre de la casa que es mi oficina y antes de entrar vuelvo a mirarlos. Pienso que el mundo para ellos es esta tarde, esa botella de cerveza, ese porro, esa sonrisa que tienen enfrente. Y pienso que el amor expresado de esa manera es amor de verdad como cuando tenía 15 años y mi novio me acompañaba a la parada del colectivo. Mi novio que me regalaba flores y poemas, que hasta me grabó un cassette con canciones de amor. Amor adolescente a las 3 de la tarde cuando el amor pareciera ser tapado por planillas de excell, por trajes y corbatas en calles céntricas, por olor a café, por tizas o por computadoras. Amor de verdad, en tiempos de siesta, en calles de adoquines o paradas de colectivo. Amor que en la adolescencia traspasa la mente, golpea el pecho, pelotudiza. Amor que en otoño no necesita más que el silencio de la tarde, un escalón de una puerta cualquiera y un beso con olor a cerveza.

miércoles, 13 de abril de 2011

Ganas, muchas ganas

De subirme a la moto de Serge, el protagonista de Mammuth y sentir que sus pelos largos y rubios me tocan la cara y sentir el viento y ver que la ruta no tiene fin, que en algun momento vamos a parar y vamos a tirarnos en el pasto, al costado, a mirar el cielo a esa hora de la tarde en que las nubes se ponen rosas y la luna ya se deja ver. Y saber que después de ese descanso vamos a volver a subirnos a la moto hasta encontrar un hostel que nos caiga bien y vamos a parar a dormir una noche, no más, porque al otro día tenemos que seguir viajando por la ruta y al otro día también y al otro día, yo agarrada a él, él agarrado al manubrio. Son verdaderas ganas de huir con un gordo narigón y viejo y francés que es un oso de peluche, que es buenazo, que me hace reír y que en la vida real se llama Gerard Depardieu.
Qué lástima que ya no la den en el Bafici.

miércoles, 6 de abril de 2011

Se llamaba Luna

Era ella, lo sé,

Una niña hermosa

Con el pelo atado en una colita alta

Se quedaba mirando algo

Que nadie podía descifrar

Algo, real, que podía ser abstracto

Algo que hacía que ella se olvidara del mundo

Aunque fuera por unos segundos

Aunque fuera mirando un bolsa de plástico

Todo lo que estaba existiendo hasta ese momento

Se condensaba en la bolsa y tu tum, latía

Todo se unía, se amarraba, se desprendía

Todo en sus ojos de arena

Y después de ese instante

En el que los músculos se aflojaban

Y la piel se volvía más fresca

Ella sabía que lo que había pasado antes

Ya no tenía importancia

Se llamaba Luna

Era el futuro

Y ese abismo descampado

Lo que la inquietaba

Lo que le daba cosquillas en la garganta

Como si estuviera a punto de gritar

Que la vida no sirve para nada.

martes, 5 de abril de 2011

Por esto me gusta Girondo

" No se me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; ¡pero eso si! - y en esto soy irreductible- no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. Si no saben volar ¡ pierden el tiempo las que pretenden seducirme! Está fue - y no otra- la razón de que me enamorase, tan locamente, de María Luisa. ¿Que me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos? ¿Que me importaban sus extremidades de palmípedo y sus miradas de pronostico reservado? ¡ María Luisa era una verdadera pluma! Desde el amanecer volaba del dormitorio a la cocina, volaba del comedor a la despensa. Volando me preparaba el baño, la camisa. Volando realizaba sus compras, sus quehaceres... ¡Con qué impaciencia yo esperaba que volviese, volando, de algún paseo por los alrededores! Allí lejos, perdido entre las nubes, un puntito rosado. "¡ María Luisa! ¡María Luisa!...y a los pocos segundos, ya me abrazaba con sus piernas de pluma, para llevarme, volando, a cualquier parte. Durante kilómetros de silencio planeábamos una caricia que nos aproximaba al paraíso; durante horas enteras nos anidábamos en una nube, como dos ángeles, y de repente, en tirabuzón, en hoja muerta, el aterrisaje forzoso de un espasmo. ¡Que delicia la de tener una mujer tan ligera..., aunque nos haga ver, de vez en cuando las estrellas! ¡Que voluptuosidad la de pasarse los días entre las nubes...la de pasarse las noches de un solo vuelo! Después de conocer a una mujer etérea, ¿puede brindarnos alguna clase de atractivos una mujer terrestre? ¿Verdad que no hay una diferencia sustancial entre vivir con una vaca o con una mujer que tenga las nalgas a setenta y ocho centímetros del suelo? Yo, por lo menos, soy incapaz de comprender la seducción de una mujer pedestre, y por más empeño que ponga en concebirlo, no me es posible ni tan siquiera imaginar que pueda hacerse el amor más que volando. "

viernes, 1 de abril de 2011

Lo que marzo dejó

Rene Residente tiene micropene.

¿Como me vas a decir eso?


Me encanta ser mujer.


Imaginate desnuda con él en la cama.

Lo destrozo


A veces siento que empecé a bailar como mi mamá.


Cuando estoy mas gorda prefiero mirarme en el espejo desnuda. Me veo mas linda, mas armoniosa.

¿Mas renacentista?

Claro.


¿Vamos a comprar cosas al kiosco de los travestis?

Si, pidamos chicles sueltos, todo, con tal de interactuar lo más posible.


La culpa no es sólo judía.

No, es judío cristiana, pero la judía es peor.

¿Por qué?

Porque la madre cristiana te dice: Te voy a matar y la judía: Me vas a matar. Creces con eso ¿entendés?

Tenés razón.


¿Que edad tienen ustedes?

¿Cuanto nos das?

Toda la noche.


Me salio un viaje a Paris y la verdad que no tenga ganas.

Bueno, dale, seguí dándonos pena vos.


¿Para vos que es un buitre?

Un ave.

Ah

¿Para vos?

Un mamífero símil búfalo.


Hace un montón que tengo ganas de una fiesta de disfraces para ir disfrazada de Amy Winehouse.


Ahora que tengo a Charo la veo a mi hermana cambiandole los pañales a Vicente y digo, no, que paja. Mucho mejor tener una perra.


Las fotos quitan el alma. ¿No sabias?


Mi hermana está saliendo con un ultra católico que toca el órgano en la iglesia y canta en el coro. Se confiesa. ¿Entendes que se confiesa?


Es que es así. Cuando una está despechada tiene que garchar.

¿Y no pensaste en teñirte?


Me quiero casar con Juan Cabandié.


Tuve sueños eróticos con Mark Ruffalo.


El amor de tu vida deja de serlo en un segundo si te dice fuistessssss


Vos sos la vida en persona.


Yo primero le decía te adoro, con la dddd bien marcada, después te quiero. De ahí pasé al te amo y ahora hay una nueva: te aLmo.

¿Con L?

Si, porque le pongo el alma ¿entendés? Lo amo con el alma.


Le dije a mamá que se ocupara ella de la decoración y vino con lo de los lillums. Le dije, pera vieja, voy a googlearlos y ¿qué te puedo decir? El lillum es cruel.


Yo si no estuviera enamorada de Francisco, me caso con Adam Sandler.


Pero que avanzada está la ciencia que hasta las flores caminan.


Estoy tan ansiosa que no puedo esperar a qu salte la tostada.

¿Te cuento algo peor?

Qué

Mi mamá tira la cadena antes de hacer pis.


Lo bueno de los hippies sucios es que no te rompen las pelotas.

Pero lo malo es que te rompen el corazón.


Tenés que construir cosas esta semana, poné la energía ahí, en serio. Y sino, por lo menos pensalo, pero esta semana según los planetas, es clave.


¡Cada día más hermosa vos!