miércoles, 28 de septiembre de 2011

Pintó la melanco

Hoy es una verdadera noche de primavera. Hoy, me dan ganas de comer al clima a besos. Hoy, se terminó. Mañana ya será costumbre el calorcito de las 8 de la noche, las polleras cortas, los pies caminando al desnudo. Ya será normal ver las bicisendas atestadas y la gente deportiva corriendo por la calle, será muy común ver las terrazas ocupadas y las mesitas con cerveza en las veredas. Será día tras día un bache menor para el verano. Será así y yo seré allá. En ¿cuántos días? Veintidós. Y todos los árboles, todas las avenidas, todos los museos, todas las flores, todos los parques, todas las bandas, todos los teatros, todas las lindas personas, todos los graffitis, toda la literatura, todos los pasos que di en esta ciudad se me amontonan en los pensamientos, se me inmovilizan en un rincón del cerebro y todo lo que no es ese rincón deja de tener significado, porque lo único que de verdad me importa es todo lo que para mi representa esta ciudad zarpada que voy a extrañar como la puta madre que me parió.

2 comentarios:

Charlie dijo...

Buenos Aires querida... qué ciudad!

SOWIE ♥ dijo...

Piel de poshito en el final!
Amo las noches de Buenos Aires como las de ayer